Día Internacional de LEGO, ¿Por qué festeja la creatividad el 28 de ...
El 28 de enero se estableció como una fecha especial para celebrar el Día Internacional de LEGO, los icónicos bloques de construcción que nacieron de la visión del carpintero danés Ole Kirk Christiansen. Desde su creación, la compañía ha crecido hasta convertirse en un referente global en el ámbito del entretenimiento y la creatividad, dejando una huella imborrable en generaciones de niños y adultos.
A lo largo de los años, LEGO ha sabido evolucionar y mantenerse relevante, adaptándose a las tendencias y explorando nuevas formas de involucrar a su comunidad. Con sets tan diversos como los de Star Wars, Harry Potter, Batman o el mundo de Minecraft, las coloridas piezas ofrecen un espacio para que cada persona se exprese a través de la construcción.
El Día Internacional de LEGO no solo celebra a los icónicos bloques de construcción, reconocidos como los más famosos del mundo, sino que también honra el impacto cultural y educativo de los juguetes, transformando la forma en que las personas se divierten, aprenden y crean sin límites.
Todo comenzó en 1958, cuando el inventor danés Ole Kirk Christiansen presentó la patente de los icónicos bloques. Con este acto, no solo protegió el diseño del ahora famoso ladrillo, sino que también introdujo un sistema de interconexión que permitiría construir estructuras sólidas y versátiles, desatando un universo de posibilidades creativas.
La historia de LEGO es también la historia de Christiansen, un hombre que supo convertir los retos del mercado en oportunidades. Los bloques multicolor dejaron de ser solo piezas de construcción para convertirse en una herramienta capaz de dar vida a la imaginación de millones de personas apasionadas por el diseño.
En esta fecha, los fanáticos de todas las edades se reúnen para participar en concursos de construcción, talleres interactivos y eventos comunitarios. Además, las tiendas LEGO, por su parte, se suman al festejo con promociones, actividades especiales o el lanzamiento de nuevos sets que conmemoran el día.
En medio de la Gran Depresión, una de las crisis económicas más devastadoras del siglo XX, Ole Kirk Christiansen, un carpintero danés, tomó una decisión que cambiaría la historia, dedicarse a la producción de juguetes.
Era un momento difícil, la caída de la Bolsa de Nueva York en 1929 había dejado profundas secuelas en todo el mundo y Dinamarca no fue la excepción. La pequeña empresa de Ole, que inicialmente fabricaba artículos de madera para el hogar, vio cómo los encargos disminuían drásticamente.
Con una creatividad inquebrantable, Ole comenzó a fabricar juguetes de madera en 1932, diseñando desde coches y aviones hasta autobuses. Cada pieza se trabajaba a mano, con madera de abedul lijada y pintada con tres capas, garantizando calidad en cada detalle. La idea de centrarse únicamente en juguetes tomó fuerza, y Ole decidió buscar un nombre que reflejara la esencia de su empresa.
De acuerdo con el sitio web de LEGO, fue durante un concurso entre los empleados donde surgió el nombre “LEGO”, una combinación de las palabras danesas “leg godt”, que significan “jugar bien”.
Los primeros juguetes LEGO incluyeron animales de madera, como el icónico pato con ruedas que los niños podían arrastrar. Con el tiempo, el catálogo creció, y en 1936 ya contaban con 42 modelos diferentes. Sin embargo, la historia no estuvo exenta de obstáculos. En 1942, un incendio destruyó la fábrica, pero Ole, determinado a seguir adelante, la reconstruyó.
El gran salto llegó en 1947, cuando Ole adquirió una máquina de inyección para producir juguetes de plástico. Aunque en ese entonces los juguetes de plástico no gozaban de buena reputación, Ole y su hijo Godtfred veían el potencial de este material.
Los primeros ladrillos LEGO, inspirados en un diseño de la fábrica británica Kiddicraft, aún tenían problemas de encaje. Pero fue durante una feria de juguetes, tras escuchar las críticas de un vendedor, cuando los Christiansen comprendieron lo que debían mejorar: los ladrillos debían ofrecer libertad creativa total, ser seguros y de excelente calidad.
Godtfred se dedicó a perfeccionar el diseño, introduciendo pequeños tubos en los ladrillos para garantizar su compatibilidad y estabilidad. En 1955, nació el LEGO Town Plan nº 1, un sistema que permitía construir ciudades enteras, reflejando la visión de dar rienda suelta a la imaginación.
Finalmente, en 1958, se patentó la versión definitiva de los bloques, justo el año en que Ole Kirk Christiansen falleció, dejando un legado que su hijo y las siguientes generaciones continuarían expandiendo.
Hoy, LEGO es mucho más que un juguete; es un símbolo de creatividad, innovación y perseverancia, un recordatorio de cómo, incluso en tiempos difíciles, una idea puede construir algo extraordinario.
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