Memo Ochoa y el Salernitana suman otra derrota en su camino al ...

Con el descenso a la vista, Salernitana salió esta tarde en busca de ofrecer una actuación digna y una pequeña satisfacción al público que asistió al estadio. Una victoria era lo menos que la afición esperaba, pues lo que mató al equipo de Paco Memo fueron los empates, además de las derrotas en partidos claves.

Hoy Salernitana salía a ganar

Aunque el recién llegado al banquillo del equipo de Salerno, Favio Liverani, atendió el compromiso de hoy con los mejores hombres disponibles para buscar los tres puntos, el partido se complicó por la fortaleza defensiva del Monza, que trabó el juego con demasiadas faltas durante la primera media hora del partido.

Ochoa en modo imbatible durante el primer tiempo

El portero mexicano resguardó ejemplarmente el arco de su equipo durante la primera mitad con una intervención magistral tras un remate a quemarropa a unos metros de la línea de meta, la única aproximación que demandó al guardameta durante el primer tiempo.

La falta de gol explica la situación del Salernitana

La mala fortuna y la falta de gol han llevado al Salernitana a ocupar la última posición y enfrentar el descenso. Las sensaciones que despierta en su modo de juego son mucho mejores que los resultados. La segunda mitad comenzó con una buena presión alta de los Granata, arribos por las bandas e incluso dejando escapar algunas oportunidades.

Monza busca acrecentar sus posibilidades

El equipo visitante no pudo meter en aprietos a Ochoa durante los primeros minutos de la segunda mitad. En busca del triunfo, ajustó el ataque con el ingreso de Daniel Maldini, hijo del legendario Paolo Maldini, mientras el Salernitana reacomodó la defensa con el ingreso de Jerome Boateng.

El ingreso de Maldini rinde frutos

El movimiento hecho por Raffaele Palladino al invocar a Maldini rindió sus frutos al minuto 78, momento en que el joven delantero abrió el marcador para el Monza con un golazo digno de su linaje.

Salernitana se desmorona

Tras el primer gol, llegó el segundo al minuto 83. El arreglo colectivo del equipo local decayó tanto, que la jugada del segundo gol derivó de un despeje de Ochoa, que fue robado por el bando enemigo y aprovechado para aumentar la ventaja con un remate picado de Matteo Pessina sobre la humanidad de Ochoa.

Un clavo más al ataúd

Esta derrota representa un fracaso más para Salernitana en la batalla por sobrevivir en la Serie A. Con 26 jornadas disputadas, suma 13 vergonzosos puntos