Sinner hace saltar todas las alarmas en el Open de Australia
El mérito de ganar un torneo de Grand Slam se refleja en momentos de agonía por los que pasó el italiano Jannik Sinner, que se sobrepuso a unos problemas de salud y a la resistencia deportiva del danés Holger Rune para mantenerse en el camino hacia revalidar corona en el Open de Australia.
El nº 1 mundial sobrevivió a instantes de congoja. Se encontraba tan mal que tiritó en la pista, al acabar el segundo se fue a los vestuarios con camino cansino, vacilante. Precisó de la ayuda del equipo médico del torneo, del fisioterapeuta y del médico. Los temblores se acentuaron en los inicios del tercer set. No fue hasta bien entrado el mismo, después de haber sido atendido en el vestuario, que controló mejor su estado físico. De tenis nunca anduvo mal, lo que le ayudó a no rendirse en ningún momento.
Sinner hizo saltar todas las alarmas en el Open de Australia. Estuvo al borde del KO por motivos de salud. Con la ayuda de los galenos y su propia resiliencia en un día de los calurosos y húmedos en Melbourne, se mantuvo en pie. También su rival sufrió los rigores de la temperatura y de un duro combate, aunque el transalpino ya llegó 'tocado' a la cita.
Lo ganó Jannik Sinner por 6-3, 3-6, 6-3 y 6-2 en 3h.13'. Una proeza para mantener su racha de 18 partidos consecutivos ganados y meterse en cuartos de final, contra el australiano Alex de Miñaur o el estadounidense Alex Michelsen.
"Fue muy duro, para ambos. La mañana fue extraña, no calenté, no fui a la pista. Intenté ir a la pista lo mejor que pude. El médico me ayudó. Es un torneo que cuida a los jugadores, que se preocupa de ellos. Y el público también tiene culpa en que haya ganado este encuentro", señaló Sinner, todavía medio grogui pero aliviado por el triunfo.
Desde primera hora se sintió mal, las condiciones no ayudaron, sí lo hizo más un Rune que no acaba de aprovechar las oportunidades, que busca mil excusas para justificar otra derrota más ante quienes debieran ser sus rivales directos. Continúa lejos de Sinner y Alcaraz.
Sinner hizo honor a su condición de campeón de Grand Slam, también del US Open 2024. Inicia la temporada como en la anterior, llegando como mínimo a los cuartos. Son los décimos en Grand Slam, igualando el récord italiano de Nicola Pietrangeli.
Sinner sigue adelante a la heroica. El encuentro fue tan accidentado que también sufrió un parón de más de un cuarto de hora en el comienzo del cuarto set porque la argolla que sujeta la red en su parte central se estropeó tras un saque del italiano.
Lee tambiénTuvieron que salir los operarios a arreglar el desaguisado. Una chapuza en la central del Open de Australia en pleno partido del campeón y nº 1, que pocas veces habrá pasado por tantas. Aunque resultó una bendición para Sinner, según confesó más tarde: "Estar 20 minutos fuera de la pista, pudiendo recuperarme físicamente, echarme agua fría en la cabeza. Fue beneficioso. Tuve mucha, mucha suerte", confesó.
Dispone de dos días para recuperarse, volverá a la pista el miércoles, ya conociendo el resultado del Carlos Alcaraz-Novak Djokovic, este martes sobre las 11 de la mañana horario peninsular español.